EDITORIAL 27. LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN.

 EDITORIAL   27.

LA   LIBERTAD   DE   EXPRESIÓN .

Si pudiéramos medir el alcance de la imaginación de nuestra mente, seguramente nos quedaríamos boquiabiertos de la capacidad infinita que tenemos para crear, opinar, protestar, dialogar y un sinfín más de actividades cerebrales que podemos hacer a lo largo de nuestra vida.

Y lo más grandioso de nuestra mente es que nadie la puede leer.  Tus ideas y pensamientos son tuyos, de tu exclusividad, hasta que los plasmes en un cuaderno, un libro, los publiques en tus redes sociales o lo grites a los cuatro vientos.

Aquí es donde la Libertad de Expresión tiene su razón de ser, porque lo único que podemos esconder en nuestra mente son los secretos compartidos que pueden dañar la paz y convivencia de las personas que nos rodean, es decir,  a nuestros familiares o más allegados.

Han habido personas que se llevan  sus secretos a su tumba, y yo no los critico, porque hacen bien en mantener oculto eventos odiosos que complicarían la existencia de los involucrados. Ahora bien, hay secretos que sí deberían confesarse, como cuando somos testigos de un crimen, una violación o un acto ilícito.  Porque de ninguna manera debemos proteger al delincuente por más familiar o allegado que sea, por supuesto que bajo el anonimato para evitar represalias contra nosotros.

Cuando vivimos bajo una Dictadura Política de un Gobierno opresor, la libertad de expresión es como un término desconocido, porque los opresores no quieren críticas, ni opositores a su Régimen, ni  huelgas, ni protestas y mucho menos que se divulguen a otros países, las atrocidades que cometen en violación de nuestro derecho a expresarnos.

Recuerdo el caso monstruoso de represalias que tuvieron un grupo de musulmanes, cuando un escritor hindú, de nombre Salman Rushdie, ridiculizó a Alá, su Dios, en un libro llamado los Versos Satánicos.  Lo amenazaron de muerte y desde entonces tuvo que vivir escondido y bajo un anonimato, porque los musulmanes son un grupo extremista y terrorista que en nombre de Alá, han cometido los crímenes más atroces.  Sin embargo, las garras letales del enemigo lo alcanzaron hace poco, cuando un fanático religioso musulmán, lo atacó a puñalada limpia, pero no logró ocasionarle la muerte.

Otro caso igual de monstruoso fue el de un Profesor francés que fue decapitado por uno de sus alumnos musulmanes, sólo porque éste utilizó unas caricaturas de Mahoma, el Profeta de los Musulmanes, en una de sus clases.

Francia ha sido uno de los países europeos que más libertad de expresión ha permitido a todas las comunidades propias y extrañas dentro de su Territorio.  Pero así mismo ha sido el país más brutalmente golpeado por actos terroristas en contra de sus habitantes, quienes han sido masacrados siendo inocentes. 

Yo misma sé que me arriesgo denunciando en mis publicaciones las injusticias e infamias que a diario observo y las publico en contra de éste Régimen Dictatorial Chavista.   No puedo quedarme callada, mi mente trabaja incesantemente para gritarle al Mundo Entero que nos están humillando, que están acabando con las riquezas de nuestro bello país en épocas pasadas y democráticas, que la población se siente impotente ante tanta vejación y contínua violación a nuestros Derechos Humanos y a nuestra Sagrada e Inalienable Libertad de Expresión.

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