Cuento 3. Segunda Parte.
Desde tiempos inmemoriales muchas culturas construyeron grandes obras, tesoros invaluables, monumentos históricos que aún hoy en día son patrimonios de la humanidad y que aún no han sido desentrañados los misterios de su construcción y son atribuidos a ayuda extraterrestre. Las lluvias eran muy escasas en mi pequeño pueblito, ya que solamente llovía 2 veces al año. Sus tierras áridas eran explotadas día a día extrayendole el preciado petróleo que algún día se agotará y sólo dejará a su paso desolación y pobreza como es el caso de mi pequeño mundo que después de extraerle toda su riqueza se fueron, dejando el lugar desolado y pobre. Qué diferencia si se hubiera pedido la ayuda de los extraterrestres -a quienes desde ahora vamos a llamar "turmalinos" y les he bautizado con este nombre por la piedra preciosa turmalina, la cual es celeste y emite una luz muy brillante- pues considero que estos seres son llenos de luz y sabiduría. Los turmalinos hubieran construido conexi...