Editorial 6. La Obesidad.

 LA  OBESIDAD

Muchos de nosotros creemos que la gente obesa come en demasía por grosería y gula, pero no es así.  La mayoría de obesos comen demasiado por ansiedad, angustia, falta de amor y atención por parte de sus familiares y amigos; y a veces también por traumas sufridos en su niñez o adolescencia.

Éstas personas tienen un sufrimiento tenáz porque sólo en la comida hayan el alivio a sus pesares.  Vivo en Venezuela y he visto algo curioso relacionado con la obesidad de las personas, en épocas y situaciones diferentes de la vida social y económica de éste país.

Cuando se inició la época comunista- socialista, el Presidente más loco que ha tenido Venezuela: Hugo Chávez, parecía Papá Noel en época navideña; regalaba el petróleo, hacía donaciones, regalaba la gasolina, en una palabra, parecía que corrían ríos de prosperidad en  el país, pero eso sólo era una fachada para eternizarse en el poder.  Por los resultados funestos de su gestión después de su muerte, estamos viendo un país destruido y un pueblo que clama la salida de éstos fascistas crueles.

En esos tiempos veía cómo la gente tenía los recursos para comer en restaurantes y puestos de comida rápida.  Era increíble que desde las 5 de la tarde hasta la madugada del otro día, la gente hacía enormes colas para atiborrarse de "perros calientes", "hamburguesas" y refrescos, todo ésto si se come muy seguido, es dañino para la salud y altamente adictivo, ocasionando obesidad desde niños hasta adultos.

Hoy en día es lo contrario, el país quedó en bancarrota, la gente ya no tiene recursos para comer fuera, algunos negocios quebraron; y si a ésto se suman las consecuencias de la pandémia del coronavirus, -que está durando más de lo que se esperaba- ahora veo la gente delgada, casi cadavérica.  Ya no hay obesos ahora hay gente muriéndose de hambre.  Gente que se está corrompiendo por un plato de comida, niñas que se están prostituyendo por dinero para poder llevar un pedazo de pan a sus hogares, y lo que es peor, éste gobierno juega con el hambre del pueblo, llegando a pagar los servicios de la gente obrera con comida.  

A veces me hago la idea del hombre que pesca con una caña, le muestra su carnada al pez para que caiga en ella, en este caso es parecido, logran los políticos casi cualquier cosa mostrándole a la gente una bolsa de alimentos. Con este caso se demuestra que la relación recursos-mala alimentación van de la mano para disparar la obesidad.

Hay un programa televisivo donde muestran los casos más terribles de obesidad: "kilos mortales" se llama, y en algunos casos éstas personas ya han muerto, porque no controlaron su peso, que si es muy excesivo los lleva a la tumba.  Pero ésto pasa en países muy desarrollados, donde a los obesos los catalogan como personas discapacitadas y los gobiernos de esos países sufraga los gastos de éstas personas y algunos hasta reciben jugosas pensiones, que a la larga no los ayuda a salir de su enfermedad sino más bien, contribuyen a que enfermen más o se mueran.

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